¡Hola!

 

¡Pues os enviamos una foto encantados! Nano, que es ahora su nombre, se ha puesto tan contento con la idea que me ha quitado el móvil para hacerse un selfie conmigo mientras echábamos la siesta.

 

En principio miré en las páginas de las protectoras que conozco directamente, como Sofía el refugio escuela, Arca de Noé y alguna otra. Llegué a Miwuki gracias a la búsqueda de Google, y ha sido de gran ayuda al agrupar peludos de diferentes asociaciones. El buscador es fantástico, en mi caso tenía claro que necesitaba un perro  con las características de Nano, es decir, pequeño y de pelo largo y rizado, por temas de alergias. El trato fue estupendo, Cristina estuvo atenta y disponible en todo momento, interesándose y respondiendo a cualquier duda con simpatía y amabilidad. Un 10 en ese sentido.

 

Me decidí a adoptar porque he estado en el mundo de las protectoras. Fui voluntario en Sofía el refugio escuela durante un tiempo, y sé lo mal que lo pasan los perros perdidos y abandonados, amén de no querer fomentar el negocio de venta de seres vivos. Siempre he defendido y difundido la necesidad de adoptar por encima de comprar. Hay muchos animales sin hogar que necesitan cariño y están dispuestos a dar todo el que tienen, y merecen una oportunidad de vivir felices con una familia que les quiera. El propio Nano es el mejor ejemplo, tiene una historia muy triste detrás, pero gracias a los cuidados de sus rescatadoras salió adelante, y ahora, ¡es el rey de la casa!

 

Nano es un perro pequeño pero lleno de energía. Le encanta dar largos paseos, correr y saltar como una liebre, y saludar a todo el que tiene la suerte de cruzarse en su camino, sin importar si tiene dos o cuatro patas. Le gusta jugar más con humanos que con perros, especialmente a coger y devolver la pelota, aunque tiene pilas para dedicarle un tiempo a todos. Al llegar a casa lo que más le gusta es acurrucarse en el sofá junto a alguno de sus amigos humanos. Es un gran dormilón, y come como si fuera un labrador y no un pequeño cruce de caniche, ¡pero es tan activo que su cuerpo es pura fibra!

Se adaptó estupendamente a la vida en casa desde el primer día. Es un pequeñajo muy inteligente y adaptable. Supongo que su experiencia vital le ha hecho ser un superviviente que se hace a todo sin problema. También intentamos que se acostumbre rápido a la buena vida que esperamos darle.

 

En casa estamos todos encantados con él, nos ha traído mucha alegría y siempre tiene besos para todos. Ya es uno más de la familia.

 

Esperamos que nuestra experiencia sirva para animar a otros a seguir nuestros pasos y a fomentar la adopción de animales sin hogar. Estamos encantados de ayudar.

 

¡Un saludo de Nano y Julio!